lunes, 23 de julio de 2012

Para leerlo

En esto de los libros, como en todo, según los gustos están las opiniones, y además influyen muchas circunstancias alrededor que determinan el que un libro nos guste o no nos guste.  También hay otra forma de juzgar los libros y no es el que nos haya gustado o no, sino que consideremos importante leer, saber, conocer más detalladamente, ciertas historias.  Es el caso de este libro: Cuando leas esta carta, de Vicente R. Gramaje.
Tenía un desconocimiento total de esta parte de nuestra historia de principios de siglo.  Se menciona muy de pasada la Guerra de Marruecos, pero no se estudia apenas.  Yo creía que en mi época se omitió, sencillamente, como tantas otras cosas,  pero al recomendar a mis hijos este libro me he informado y ellos tampoco han estudiado nada.  No sé si los temarios de Humanidades contendrán estos contenidos.
Pienso que hay que conocer estos tristes acontecimientos.  Tal vez son una pieza más para interpretar nuestra historia.  Una novela que tiene interés, no sólo por el pasado, sino por los protagonistas actuales que paralelamente nos ofrecen sus historias personales, nos ganan para la causa, nos plantean situaciones para la reflexión y el debate, alguna tan cuestionada como el transcurso digno de la enfermedad terminal a la muerte...


domingo, 15 de julio de 2012

Coser y coser


En el foro Creativas nos propusimos para el mes de mayo un reto o trabajo conjunto.
Libremente, cada una tenía que hacer un bolso.
Yo me cosí esta bolsa con asa larga para llevar cruzada, con bolsillo fuera y bolsillo dentro, ideal para ir de pequeñas compras: manos libres para tocar y mirar, remirar y retocar...
 y con capacidad para meter unas cuantas cosas, por ejemplo, más telas e hilos...

Para el mes de junio, la propuesta fue "algo para los bebés".
Como una forma de practicar las aplicaciones en tela, 
que amablemente nos ha explicado Cloti en el foro,
 nada mejor que unos sencillos baberos para los bebés de amigas
 que han nacido o van a nacer...
Es admirable la calidad y la variedad de los trabajos de mis compañeras.


martes, 10 de julio de 2012

Aventureros

  Aventureros son los protagonistas de estas dos novelas: aventureros, valientes, viajeros...
  En Palmeras en la nieve, de Luz Gabás, nos encontramos a unos aragoneses que desde los Pirineos viajan a Guinea, en aquellos años en que era territorio español, no sé si colonia, protectorado, territorio dominado o territorio amigo.  Muy confusa esa parte de nuestra historia ya no tan reciente. Los protagonistas son trabajadores, víctimas, verdugos... en la novela hay amor, pasión, odio, mucha emoción y está muy bien contada la vida que allí llevaban tanto los nativos, las dos razas predominantes como los españoles que allí explotaban el cacao y regentaban otros negocios. 
  Este libro, además de permitirnos viajar por tierras lejanas, nos enfrenta a la complicada relación entre personas de razas diferentes, algo que tiene en común con la novela de Belinda Alexandra: Secreto de hermanas.
  Una novela que se lee con interés del principio al final.  La primera parte se desarrolla en Praga, donde nacieron y pasaron su infancia las dos hermanas protagonistas.  Una grave situación familiar las obliga a exiliarse a Australia, donde se ha afincado su tío, también viajero, aventurero y valiente como acaban siéndolo ellas también.
  Viajamos otra vez por este continente y asistimos a distintas aventuras de la peculiar familia, víctima de la maldad del padrastro de las hermanas así como del racismo hacia la tía hindú...aventuras relacionadas sobre todo con el nacimiento del cine, con escasos medios y nada de tecnología, nos introduce en la grabación y puesta en escena de las primeras películas, con muchos más aspectos en común con el teatro de lo que actualmente les une.
  Bonitas historias de amor presentes en cada momento de esta novela y como casi siempre, un final para comentar y debatir...

domingo, 1 de julio de 2012

Acabó el curso

No quería escribir nada.
Pero me despedí de mis niños, después de tres años y ya los echo de menos.  Al curso que viene, otros nuevos, otros a los que conocer y querer, otros con los que  iremos aprendiendo juntos muchísimas cosas...
Pero no quería escribir nada este año.
Flores realizadas con las compañeras del Foro Bordando Juntos
Este curso que acaba con tanto recorte y tanta decepción, un sentimiento de fracaso y de impotencia ante el desmantelamiento de toda una estructura que hacía que la escuela pública fuera de calidad.  Y la escuela rural es la mayor sufridora.
Y a los niños es a quien más va a afectar.
Lo que pasa es que ellos apenas lo van a sentir, porque los niños pequeños no se van a dar cuenta, para eso estamos los maestros.
Supliremos con creces los recortes.  Nos multiplicaremos, haremos que haya más minutos en cada sesión, echaremos mano de nuestra imaginación y creatividad, como cuando no teníamos casi nada en las aulas y haremos que los niños se encuentren de maravilla en su universo escolar.
Y aunque sepamos que los valores se han perdido o están devaluados, seguiremos educando en valores y haremos que cada vez sean más creativos, que buena falta les va a hacer a estas generaciones...
Vamos a seguir tirando del carro, seguiremos formándonos por nuestra cuenta, poniendo en práctica nuevas metodologías, investigando sobre la labor docente, como venimos haciendo desde hace mucho tiempo, porque somos un colectivo entregado.  Atenderemos a todos todo el tiempo que podamos y seguiremos dándole vueltas a la cabeza también fuera del horario escolar a ese niño con el que no acabamos de entendernos, a ver qué le está pasando, cómo le puedo ayudar más... y seguiremos probando cómo hacer flores reciclando botellas de plástico o cómo funciona ese programa que me puede servir en clase.
Porque somos un colectivo entregado.