
Mejores ratos, sobre todo más dulces, pasé leyendo dos novelas de Daniel Glattauer, Contra el viento del norte y Cada siete olas. Desde el principio te enganchas y quieres seguir leyendo los correos electrónicos... No te cansas de seguirlos como podría suceder en la pantalla, porque las novelas tienen un magnetismo que te atrapa, pasas de la primera a la segunda sin poder evitarlo...Novelas "caramelitos sugus", como yo las llamo, que te hacen pasar momentos agradables, están bien escritas y contienen mucha ternura, algo que nunca viene mal tener a mano...

Una novela bien distinta, pero desde luego, estupenda, que acabo de leer es El alcalde del crimen, de Francisco Balbuena. Recomendable al cien por cien para quien le guste la novela negra, la novela histórica, una buena historia de suspense, una buena historia de amor. Personajes excelentes, el mismísimo Jovellanos, alcalde del crimen en Sevilla, una trama interesantísima con asesinatos en serie que desde las primeras páginas te tiene intrigada, te introduce en la Sevilla de los ilustrados y los inquisidores de hace dos siglos, te paseas, recorres lugares todavía emblemáticos de la ciudad y te mantiene alerta por si hay alguna pista que se les escapa a los protagonistas...